No hay democracia sin ciudadanía activa. Los derechos son para ejercerlos y la participación en Venezuela es un derecho. En esta oportunidad escribo sobre los canales de participación, el derecho a ejercerla y experiencias organizativas en nuestro país.

En toda Venezuela el acceso al agua potable se ha convertido en un problema.  Hay protestas por todas partes, pero también hay ciudadanos que se organizan para monitorear el servicio y también proponer soluciones, como es el caso de Barquisimeto Sedienta, que tiene sus pequeños capítulos en algunas comunidades.  Los servicios públicos son un derecho y los ciudadanos deben estar atentos no sólo para protestar eventualmente cuando están fallando:  la organización de los vecinos permite acciones más efectivas y ayuda a la perseverancia, logrando la mejora en la prestación de los mismos. En algunas de esas comunidades tienen su propio grupo de chat y pueden monitorear calle por calle.  

Un ciudadano es una persona que se sabe poseedores de deberes que debe cumplir y derechos que existen para ejercerlos, que sirven para  vivir mejor, con dignidad;  por eso hay que conocerlos, defenderlos y, subrayo, ejercerlos porque son para su bien.  Organizarse es una buena manera de  defenderlos y ejercerlos al mismo tiempo.

En el preámbulo de nuestra Constitución se establece que se pretende refundar la República “para establecer una sociedad democrática, participativa y protagónica, multiétnica y pluricultural” (el subrayado es mío).  Revisemos algunos derechos que contribuyen a esa dimensión ciudadana de la participación.

Según la CRBV vigente tenemos derecho a la asociación con fines lícitos.  ¡Aproveche! ¡Hay tanto por lo cual podríamos asociarnos! (Art. 52); tenemos derecho a la libertad de expresión (Art. 57).  ¡Exprésese, pero sin ofender, sin descalificar, ni amenazar a nadie! Tenemos derecho a la participación en los asuntos públicos, directamente o a través de nuestros representantes (Art. 62).  Un consejo:  no se lo deje todo a los representantes, de vez en cuando hágalo usted directamente.  El sufragio es un derecho:  las elecciones deben ser libres, universales, directas y secretas (Art. 63).  ¿Leyó bien? ¡Es un derecho!  Los electores tienen derecho a pedir a sus representantes que rindan cuenta pública  sobre su gestión (Art. 66).  ¿Qué tal? ¿No sería bonito que así como en una junta de condominio, cuando hay cambio, la junta saliente explica qué hizo, qué queda pendiente o qué nuevos problemas hay, los servidores públicos electos hicieran lo mismo? Al menos así lo he hecho yo cuando he sido de la junta de condominio.  Tenemos derecho a la asociación con fines políticos (Art. 67);  derecho a manifestar pacíficamente y sin armas (Art. 68)… Alguno de ustedes dirá de qué valen esos derechos establecidos en la Constitución si la Ley se aplica de manera arbitraria… Eso es verdad, hay detenciones arbitrarias,  por eso la necesidad de las organizaciones que defienden los DDHH y las organizaciones de vecinos y ciudadanos para luchar por mejores condiciones de vida.  Aisladamente somos más vulnerables.

Y antes de pasar a dar algún ejemplo de organización, así sea para que sepamos que existen, me permito recordar que también los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a participar, a asociarse, a expresarse, a defender sus derechos -que incluso es un deber- y es necesario acompañarles como lo hace la REDHNNA, de la cual Fe y Alegría forma parte, así como CECODAP, Prepara Familia, la Red de Casas “Don Bosco”, la Cátedra de la Paz, Luz y Vida, Hogar Virgen de Los Dolores, Aldeas Infantiles, el Cendif de la UNIMET, el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UCAB, entre otras.

Y ahora un ejemplo.  La Gente Propone es una organización de ámbito municipal, fundada en el 2015 por el Grupo Social CESAP, que promueve acciones de ciudadanos en 12 municipios de 10 estados entre ellos: San Francisco y Jesús Enrique Lossada (Zulia), Valera (Trujillo), Libertador, (Mérida), Iribarren y Jiménez (Lara), Girardot (Cojedes), Valencia (Carabobo) entre otros. 

La Gente Propone impulsa observatorios de servicios públicos, activan acciones de contraloría social, recogen propuestas para resolver problemas del municipio… @LaGentePropone está cerca de la gente de a pie, además de trabajar con las redes sociales, coloca buzones en lugares públicos para recoger opiniones, denuncias y propuestas de ciudadanos, luego las organizan y hacen públicas.

Aislarse no ayuda, no resuelve nada… “La peor diligencia es la que no se hace”, suele decir una amiga mía de Ciudad Guayana. “Sálvese quien pueda” puede significar que no se salve nadie. Esperar que el maná venga del cielo o que el otro haga no tiene futuro  y, en solitario, uno se cansa más rápido. Usted, ¿piensa quedarse sin hacer nada?